martes, 15 de mayo de 2012

POCIÓN Nº 20: "La vida de Steven Dwain" de Mario Herrero

Cuando descubrí esta novela, no tuve ninguna duda en saber que quería leerla porque despedía originalidad a raudales. Y es que, en realidad, creo que nunca hasta ahora había leído ninguna obra en la que la interacción entre el escritor y el libro como tal fuese tan fuerte y tan evidente.

Gracias a Editorial Atlantis, me comí casi literalmente el libro en muy poco tiempo y es que autor y protagonista no te sueltan hasta que llegas al Epílogo.
Steven Dwain es apuesto, seductor, una máquina de matar si se lo propone, un policía encantador y además muy inteligente. Vaya, que es casi perfecto. Pero, a pesar de ello, medio mundo está en su contra y quiere matarlo. A Dwain le salen enemigos de debajo de las piedras y una y otra vez tendrá que sortear peligros para intentar mantenerse con vida. Pero el autor que le ha dado vida, también está pensando en matarlo...
Siempre leo el prólogo de los libros pero, en este caso particular, es más necesario que en ningún otro, ya que es aquí donde conocemos al escritor, donde se presenta, se define y nos dibuja las pautas del libro que va a nacer bajo su pluma (queda más literario lo de la pluma que lo de un teclado de ordenador, ¿no?).  En estas páginas el autor se convierte en un dios, ya que tiene la capacidad de moldear y crear a su antojo personajes y situaciones. Nos avisa además de que seguirá interviniendo en la obra, no solo escribiéndola, sino que participará activamente hablando con nosotros, haciendo anotaciones y comentarios. Pero, obviamente, para que un libro finalmente exista, hay que leerlo y ahí entramos nosotros en el juego.

Capítulo 1... Steven Dwain. El protagonista de los protagonistas. Un hombre al que cuesta encontrarle fallos y que gusta desde el primer momento, a pesar de sus alardes de justificada prepotencia en algunos momentos. Nada más empezar, asistimos al escenario de un crimen que Dwain, cual Sherlock Holmes de nuestros días, resuelve sin apenas pestañear ni moverse del sitio, dejando por ineptos a Henry Norton y Peter Giggs, policías como él de Marble City, pero con el intelecto de un mosquito.
Pronto aparece de nuevo el escritor, al principio en varios capítulos que llama "Reflexiones" y que se van alternando con el desarrollo de la historia, luego ya de forma irregular. No tarda mucho en darse cuenta de que su creación debe morir y es entonces cuando asistimos a un gran despliegue de enemigos del policía que vamos conociendo poco a poco y que usarán todo lo que está en sus manos (y todo lo que el escritor les facilita como ayuda) para acabar con el objeto de su odio. Barriles de pólvora, pistolas táser, lanzallamas, katanas... cualquier arma imaginable la tendrán los personajes del libro a su disposición para esgrimirla cual Rambo en la jungla.

Y es que aquí hay dos junglas. Por un lado las calles de Marble City y por otro su prisión. Villanos de las más variopintas categorías se darán cita con un único objetivo común. Desde viejos enemigos hasta nuevos que van surgiendo en el camino y también un anciano al que se le despierta el instinto asesino sin saber siquiera quién es Steven Dwain.
Nos vamos dando cuenta, a través de las intervenciones del autor, de que un escritor tiene el don, la capacidad y la posibilidad, de mostrarnos una historia a su antojo, de dotarla de acción o de sensibilidad, de fantasía o de realidad y, de cualquiera de las formas que elija, intentar ofrecernos un producto creíble y atractivo si así lo desea. Se examina con lupa, de hecho, la labor del escritor, de la escritura y de las obras que perduran a través del tiempo.

A través de este análisis tan exhaustivo conocemos los pensamientos y quebraderos de cabeza de un escritor al dar a luz a su obra, cómo esta queda expuesta a su propio ojo crítico antes que al de los demás, a sus cambios de ideas, a la introducción de personajes cuando el texto así lo requiere, a la simpleza o la elaboración de las situaciones e incluso a las escenas casi obligadas en cualquier libro y película (pocas hay que no registren en su metraje o en sus páginas una historia de amor y/o sexo).

Es, en definitiva, una obra excéntrica y exagerada, divertida y diferente, que nos permitirá a un tiempo conocer a autor y protagonista, aunados o enfrentados según el momento y viendo en directo el duelo que entre ellos se establece. ¿Quién será el vencedor y quién el vencido? El escritor puede hacer lo que quiera con sus personajes ¿o no?.

Mario Herrero, nació en Madrid. Es hijo del guitarrista y compositor flamenco Óscar Herrero y de su mujer y mánager Carmen Monreal. Ha ganado algunos concursos y certámenes literarios y además ha debutado en el teatro con su obra "No es nada difícil hacer reír". 

"La vida de Steven Dwain" es su primera novela publicada. Actualmente está trabajando en su siguiente libro.

Puedes saber más del autor y su obra en:

9 comentarios:

  1. ¡Me lo apunto! Tiene muy buena pinta....

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  2. No lo conocia, pero me lo apunto sin duda!! Tiene una pinta estupenda. Besos

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  3. ¡Qué original! Me da que cumple algo que yo siempre he defendido, que es mentira eso de que el autor puede hacer lo que quiera con los personajes, pues estos tienen vida propia. ¡A la lista! ;)

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  4. Aquí el autor, encantado de que se le mencione! Podéis encontrar "La vida de Steven Dwain" en la Casa del Libro, pero es normal que se agoten, así que no dudéis en pedirlo si lo queréis y no lo tienen disponible!
    Un saludo y gracias,
    Mario Herrero.

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  5. Parece un libro bastante extraño, no sé si me gusta o no la verdad, por un lado me parece original y la reseña deja con curiosidad por descubrir la obra pero por otro lado no estoy muy convencida de que me vaya a gustar, lo dejaré con un interrogante para seguir leyendo reseñas
    besos

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  6. Qué libro más raro o_O. La verdad es que es diferente pero no me acaba de llamar...no sé.
    Un beso!

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  7. Gracias por vuestros comentarios. Está claro que no todo puede gustar a todo el mundo, pero seguro que poco a poco habrá más reseñas para poder opinar.
    Desde luego, os confirmo que es poco convencional, yo nunca había leído algo así y me encantan los libros originales y diferentes, así que animaos y luego me contáis :D

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  8. Parece raro y muy original,igual hay que leerlo =D
    Besos

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